Desde el chapitel de Huichapan, Hidalgo, la noche del 16 de septiembre de 1812 el general Ignacio López Rayón y Andrés Quintana Roo recrearon el primer grito de independencia de México.
Solamente habían pasado dos años de que el cura Miguel Hidalgo y Costilla tocó la campana de la iglesia en Dolores, Guanajuato, para llamar a la población a sublevarse contra el gobierno español.
Con el grito: “¡Viva la América! y ¡muera el mal gobierno!”, inició el movimiento que se orientó hacia la conformación de un México soberano, libre e independiente.
¿Qué es el chapitel?
Es una casa ubicada en la calle Reforma, en pleno centro histórico de Huichapan. Tiene dos plantas, una puerta y un balcón con barandal de hierro orientado a la plaza principal.
En la parte baja de la casa, hay un museo donde se exhibe parte de los hallazgos que aportan a la narrativa de la historia de este Pueblo Mágico. Entre ellos, la réplica en miniatura de la campana que tocó el cura Miguel Hidalgo en Dolores, Guanajuato.
Cuenta la historia que Ignacio López Rayón llegó a Huichapan el 13 de septiembre de 1812 e inmediatamente organizó la celebración. Tres días después, se asomó al balcón del chapitel junto con Andrés Quintana Roo y recrearon lo que sería el primer grito posterior al grito de Dolores.
A partir de entonces, las noches de todos los 15 de septiembre llenan de luz y color al chapitel para celebrar y recordar el movimiento que independizó a México de España.